Abe se desplazará después a París, y continuará su gira hacia Alemania, Reino Unido y finalmente Bélgica, donde el primer ministro participará en la celebración en Bruselas de la cumbre UE-Japón.
La visita de Shinzo Abe a España, la primera que se produce en 11 años, se focaliza en seguir fortaleciendo la relaciones entre España y Japón en el marco de las celebraciones del Año Dual España-Japón, que celebra el 400 aniversario del desembarco de la primera embajada japonesa a España. “Impresionado” por la Catedral y con un interés especial por el Camino de Santiago debido a los paralelismos con el Camino de Kumano, Shinzo Abe y Mariano Rajoy han recorrido la capital gallega junto a sus esposas, Elvira Fernández y Akie Abe, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y el delegado del Gobierno, Samuel Juárez.
Una semana después de la visita de Barack Obama a Japón, Shinzo Abe está realizando su gira europea con un tema delicado en su agenda: la reciente escalada armamentística que sufre la zona, sobretodo a causa de las disputas con China por las islas Senkaku (o Diaoyutai en chino). Por otro lado, el primer ministro japonés, que también ha venido a defender sus reformas económicas estructurales conocidas como Abenomics, está negociando un pacto de libre comercio con la Unión Europea que estaba encallado y que podría ayudar a las dos regiones a mejorar sus economías.
El presidente del gobierno, Mariano Rajoy, destacó en la visita que ambos países comparten muchos valores y ha calificado esas relaciones de “excelentes” y ha obsequiado a Shinzo Abe con un albariño de la denominación de origen Rías Baixas, una muestra de que “los vinos españoles son los mejores del mundo”. Por su parte, el primer ministro japonés ha regalado al presidente español unas botellas de sake. La visita de Shinzo Abe se produce siete meses después de que el presidente del Gobierno español visitara Tokio y Fukushima.