Qingtian es la comarca de la que proviene el 70% de los inmigrantes chinos a Cataluña y Badalona es una de las ciudades catalanas con más población procedente de este país de Asia Oriental. En la zona de Fondo (Badalona y Santa Coloma) se concentran cerca de 9.500 chinos del total de 46.000 que hay en Cataluña.
Los objetivos prioritarios que se han establecido con este acuerdo son conocer la didáctica de las matemáticas en las escuelas china, facilitar la integración con el alumnado chino en el sistema educativo catalán, intercambiar correspondencia entre los alumnos que propicie el conocimiento y el respeto entre las dos culturas, y el intercambio de aspectos metodológicos y curriculares entre el profesorado.
La delegación que viajó a China para rubricar esta colaboración estaba formada por Celestina Valmorisco, directora de la Escuela Miguel Hernández de Badalona, Fàtima Romero, inspectora de Educación de Badalona y especialista en matemáticas, Gaëlle Patin-Laloy, responsable del programa de Comunidades Asiáticas de Casa Asia, y los representantes de la Asociación Popular Cultural China, Chen Shufen y Ji Xiangyang. Por parte china, asistieron el director del centro, Jianfeng Chen, el responsable del Departamento de Educación, Ren Zhenyu, el director de la Oficina de Asuntos Exteriores de Qingtian, Xu Xiaofang, y un buen número de profesores.
Una escuela comprometida con la integración
El 97% del alumnado de la Escuela Miguel Hernández de Badalona es extranjero y el chino representa el 30% de los alumnos matriculados. Una de las preocupaciones de la escuela es favorecer la cohesión entre los estudiantes de procedencia tan diversa, a la vez que éste participe en un entorno de convivencia pacífica. También se trabaja en su integración intentando que sea lo menos traumática posible, pero sin que pierdan sus raíces.
La Escuela Miguel Hernández participa en uno de los Planes Educativos de Entorno que despliega el Departament d’Ensenyament. En este marco, su directora, Fàtima Romero, cedió las instalaciones del centro para que la Asociación Popular Cultural China pusiera en marcha el proyecto «Xino Xano», que consiste en impartir clases de lengua y cultura chinas cada sábado, abiertas al alumnado de otras escuelas. Estas clases se han ampliado los dos últimos años con clases de cultura catalana dirigidas a alumnos chinos.