Desde 2005, cuando Hu Jintao firmó el acuerdo de asociación estratégica con el entonces presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, no pisaba suelo español un jefe de Estado chino, cuyo viaje coincide con el 45 aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre ambos países.
El Gobierno concede especial relevancia a la visita de Xi, cuyo objetivo es actualizar y renovar la relación estratégica” sellada hace trece años, “consolidar este marco de confianza con resultados concretos y potenciar la colaboración económica.
En su única escala en Europa, el presidente chino llega hoy martes y el jueves por la mañana emprenderá rumbo a Argentina para participar en la reunión del G20.
La apretada agenda de Xi, al que acompaña su esposa, Peng Liyuan, incluye dos cenas con los Reyes, el martes en el Palacio de la Zarzuela y al día siguiente en el Palacio Real.
Felipe VI le dará la bienvenida oficial con todos los honores el miércoles por la mañana en el Palacio Real, antes de visitar el Senado, donde habrá una sesión solemne de las Cortes Generales en el antiguo salón de sesiones donde pronunciará sus primeras palabras.
Posteriormente, tendrá la lugar la reunión de Xi con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el Palacio de la Moncloa, donde firmarán varios acuerdos en materia de comercio, fiscalidad, cultura, ciencia y tecnología, así como la reactivación del Consejo Asesor Empresarial, inoperativo desde su creación en 2015.
En una carta que envió a Felipe VI el pasado 9 de marzo para celebrar el 45 aniversario de los vínculos diplomáticos, el líder comunista expresó su deseo de “profundizar la amistad tradicional y empujar para que la asociación estratégica integral llegue a un nivel más alto”.
Con este objetivo, el presidente chino reiterará su oferta para que las empresas españolas se impliquen en el multimillonario proyecto de infraestructuras y comunicaciones de las nuevas rutas de la seda.
Xi expondrá sus planes en el foro empresarial con que abrirá su agenda el martes, al que asistirán directivos de cerca de una veintena de compañías españolas y otras tantas chinas, que en los últimos años también han acrecentado su interés por instalarse en España.
El exjefe del Ejecutivo Mariano Rajoy estuvo en el foro de mandatarios que se celebró en Pekín en mayo de 2017 para impulsar la nueva conexión entre Asia y Europa y Xi trasladará su invitación para que Sánchez acuda al segundo foro en abril del próximo año.
España quiere buscar fórmulas para seguir reduciendo el déficit comercial con China, después de que en 2016 y 2017 hayan crecido las exportaciones un 14,8 y un 28 por ciento, respectivamente.