Mientras jóvenes de alrededor del mundo -tanto en democracias occidentales como en la primavera árabe- cuestionan las reglas del juego sobre las que se asienta el poder en un sistema de gobierno, y mientras los mercados continúan acechando los países europeos en la actual crisis económica, el Diálogo Oriente-Occidente da voz a actores de distintos países para proponer nuevas fórmulas de gestión, nuevas ideas y una estrategia conjunta para mejorar la gobernanza global. Como plataforma y laboratorio de ideas para generar un cambio hacia nuevos caminos en común, cabe destacar el papel que juegan la juventud y las mujeres en este momento de transformación en gran parte del mundo. El papel de los jóvenes y las mujeres será clave en la perspectiva de liderazgo y participación política para solucionar temas como la erradicación de la pobreza, la resolución de conflictos y el desarrollo sostenible.
Una perspectiva multidisciplinar
En la presentación de la 8ª edición, Juan José Herrera de la Muela, director general de Casa Asia, ha destacado la importancia actual de la gobernanza en el programa del Diálogo ya que pretende “dar voz a las diferentes entidades para promover una nueva estructura de gobernanza que ponga acento en las mujeres y la juventud desde el liderazgo”. Según Herrera de la Muela, nos encontramos ante una transformación sistemática del paradigma donde una redefinición es necesaria: “los estados ya no son los únicos actores relevantes, sino que cada vez más voces trabajan en la reelaboración de las reglas de juego”. La democracia occidental tampoco es el único modelo por lo que “los desafíos del siglo XXI se tienen que enfocar desde una perspectiva multidisciplinar”.
Por su parte, Kiyotaka Akasaka, secretario general adjunto de Comunicaciones e Información Pública de Naciones Unidas, ha asegurado que “los ciudadanos necesitan un cambio, una agenda hacia un futuro que todos queremos, con oportunidades para todos, desarrollo sostenible y donde todos tengamos voz”. Akasaka ha añadido que “los problemas económicos y financieros los comparten muchos países, por lo que ningún país puede hacerles frente por sí solo”. Asimismo, ha señalado que la ONU es el mejor foro para alcanzar este objetivo, aunque para cumplirlo se requiere más asociación entre los estados y que la ONU lidere este camino.
El secretario de Asuntos Exteriores del Departamento de Presidencia de la Generalitat de Catalunya, Senén Florensa, ha iniciado su intervención asegurando que “existe la necesidad de una nueva gobernanza global, además de una nueva relación entre gobierno global y local”. Asimismo, se necesita “la reestructuración de un multilateralismo más democrático que tenga en cuenta todos los actores: toda la comunidad internacional sin excepciones”, ha añadido, insistiendo en que los gobiernos descentralizados tienen una tarea esencial de “acercarse más a la sociedad” a través de procesos de descentralización porque “a menos intereses geoestratégicos, mayor libertad de actuación”. “Cataluña es la puerta de entrada de Asia-Pacífico por lo que hay que procurar incentivar su relación económica, comercial y humana”, ha añadido. En este sentido ha asegurado que la presencia de Casa Asia “ha permitido reforzar a las comunidades asiáticas en nuestra casa y que nuestras instituciones estén cada vez más presentes entre los países asiáticos”.
La concejala del distrito de Horta-Guinardó del Ayuntamiento de Barcelona, Francina Vila, ha hecho hincapié en las voces que reclaman otra democracia, “una verdadera democracia”. Vila ha afirmado que hasta hace poco se creía que la democracia sólo necesitaba votos, “pero no, necesita calidad, transparencia y otros valores que hemos de reivindicar”. “Reivindico otra manera de hacer política porque la voz de la democracia también está en las calles y en las plazas”, ha continuado, “además de que las voces de unos pocos no pueden poner en entredicho los derechos de la mayoría”.
Visiones sobre la gobernanza global
La moderadora de la sesión plenaria del Diálogo, la periodista Núria Ribó ha sostenido que la globalización requiere nuevos modelos de gobernanza. Los países emergentes quieren estar representados en las organizaciones internacionales donde sus voces sean escuchadas por lo que “hace falta reflexionar sobre las nuevas estrategias para un nuevo modelo de gobernanza”, ha añadido..
Vicenç Navarro, catedrático de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona y profesor de Políticas Públicas de la Universidad Johns Hopkins de Baltimore (EE. UU.) ha considerado que “la palabra gobernanza está sobreutilizada: es un argumento que se usa para defender políticas sumamente impopulares”. En lugar de más divisiones, asegura que hace falta más unidad y así “ir descubriendo los puntos en común de las clases populares de Asia con las de Europa”. En este sentido, Navarro ha opinado que las clases populares chinas tienen más en común con las clases populares de Europa que con las élites gobernantes de su propio país.
En su turno Kiyotaka Akasaka, ha advertido que existen diferencias entre ideas sobre cómo gobernar en China, India y Japón. En China ha tenido lugar un debate sobre valores universales que se dan por hecho en España. “Hay elementos buenos y malos en los valores asiáticos: en Japón primero intentamos mantener el empleo y en otros, en cambio, se centran mucho más en valores sociales e individuales”.
La directora del Musawah “Un movimiento global para la igualdad y la justicia en la familia musulmana” de Malasia, Zainah Anwar, ha insistido en que nos encontramos ante un momento emocionante en el que están teniendo lugar debates religiosos por primera vez ya que “cualquiera puede formar el significado y comprensión del Islam”. En este sentido, las mujeres musulmanas “hablamos para defender nuestro lugar y derechos en nuestra religión”, pero aclara que no se trata de una lucha por la interpretación del Corán. Anwar ha sostenido que “no existe ninguna diferencia entre el Tea Party de EE. UU. y lo que ocurre en países musulmanes”, por eso, es necesario expandir el espacio público y democrático que reconoce el espacio entre el Estado y la religión.
Mary Michele Connellan, representante del Modelo Catalán de Naciones Unidas de la Asociación para las Naciones Unidas en España (ANUE), ha señalado que existen diferentes perspectivas que dependen de si provienen de Oriente o de Occidente, aunque los derechos humanos y la justicia no están necesariamente relacionados con estas perspectivas. “Necesitamos volver a los derechos humanos básicos”, ha concluido.
Gobernanza, economía y globalización
Factores como la gobernanza, la economía y la globalización experimentan, en estos momentos de crisis, un proceso de transformación en el que la sociedad internacional debe plantearse si los modelos vigentes hasta hoy continúan siendo válidos. Este ha sido el tema que ha centrado la mesa redonda “Gobernanza, economía y globalización” moderada por Elena Pisonero, socia y asesora principal del presidente de KPMG Recursos, quien ha advertido que “las soluciones lineales y simples no sirven”.
Javier Santiso, director del Centro para la Economía Global y Geopolítica de ESADE, ha abierto el diálogo haciendo hincapié en el “rebalanceo” económico, financiero y tecnológico de los mercados emergentes. “El mundo se esta descentrando a una gran velocidad”, ha advertido el ponente a la vez que instaba a la audiencia a “reconfigurar los espacios de diálogo internacional sobre una base más equilibrada”. Javier Santiso ha concluido su intervención advirtiendo que aunque el nuevo contexto mundial presenta retos, también ofrece oportunidades.
Para Sun Jisheng, decana y profesora de la Universidad de Asuntos Exteriores de China, es precisa la reforma y mejorar las principales instituciones financieras, promover el desarrollo de los países y fomentar la gobernabilidad desde un nivel regional. Jinsheng ha mencionado que los medios de comunicación y las redes sociales pueden contribuir a “reforzar los valores positivos para crear una sociedad más harmónica”.
Finalmente, Braemar Mathi, directora de la Asociación de mujeres para la investigación, ha iniciado su intervención con la desafiante frase “no soy economista pero sé que éste es parte del problema”. Mathi ha descrito la gobernabilidad como “un proceso de toma de decisiones que exige transparencia y responsabilidad” y ha destacado la crisis de liderazgo político y la pérdida de valores de la ciudadanía.
El liderazgo de las mujeres para el cambio social
Saniye Gülser, directora de la División Igualdad de Género de la UNESCO, ha afirmado que “no hay persona ni país que pueda considerarse una isla” y ha proseguido destacando la importancia de dicho diálogo donde se ha abordado el papel de la mujer como agente activo en el proceso de cambio social.
Experta en la resolución de conflictos en el Mindanao musulmán, Amina Rasul-Bernardo, directora del Consejo Filipino sobre islamismo y democracia, ha recordado que “hay que salir de nuestras zonas de comodidad porque posiblemente éstos otros que no conocemos son la clave del éxito”. Según Rasul-Bernardo, la mujer sometida a la violencia de los conflictos bélicos indirecta e inconscientemente hará participes a sus hijos de esta misma violencia.
Por su parte, Bandana Rana, coordinadora general para el Sur de Asia de la campaña de Igualdad de Género y directora ejecutiva de la ONG Saathi, ha destacado que a pesar de la importante presencia de la mujer en las Cortes Generales, el Parlamento nepalí “sigue siendo dominado por hombres” y ha continuado su intervención preguntándose “si la política es un espacio adecuado para la mujer”.
La presión social generada por un grupo de mujeres puede imponerse a la ley de la sharia, así lo ha demostrado Ratna Osman, directora ejecutiva de Sisters in Islam, que ha explicado la labor de concienciación social de Sisters in Islam en Malasia.
Para Queenee Choudhury, especialista de Relaciones con Patrocinadores, UNWOMEN, “la igualdad entre los géneros no es solamente un derecho básico sino que sus logros tienen beneficios”. Choudhury ha asegurado que el objetivo de la entidad que representa es “tener una organización más fuerte y dinámica defensora de los derechos de las mujeres y las niñas dándoles una voz más poderosa”.
La voz de los jóvenes. Gobernanza global: retos y oportunidades
“La vida es breve y efímera. El tiempo para ser joven es muy corto. Así, que utilizad vuestra juventud de manera eficiente”. Con estas palabras ha finalizado su aportación el secretario general adjunto de Comunicaciones e Información Pública de Naciones Unidas, Kiyotaka Akasaka. Akasaka ha mostrado todo su apoyo a los jóvenes del mundo que participan, replantean y piden un cambio en la gobernanza global para construir un futuro comprometido con las generaciones que están por venir. “Los jóvenes confían en sí mismos, ellos pueden cambiar la sociedad”, ha dicho. Akasaka ha planteado el cambio climático, los derechos humanos, las desigualdades sociales y el crecimiento económico sostenible como retos comunes de la nueva sociedad global.
Asimismo, los portavoces de los más de cuarenta jóvenes que estos tres días han debatido sobre los retos y las oportunidades de la nueva gobernanza global, han presentado sus conclusiones. Entre sus propuestas destaca una mayor promoción de bancos éticos, la participación de los jóvenes en parlamentos y en los presupuestos, la creación de nuevas plataformas de comunicación para llegar a todos los jóvenes, la promoción de debates entre niños y la administración pública, o una mayor accesibilidad a los políticos. Pero, sin duda, la propuesta más fuerte ha sido la de redistribuir y repartir el poder dentro de las Naciones Unidas para evitar el abuso del mismo y lograr una mejor representación de los estados miembros, además de una mejor capacidad de resolución de los problemas mundiales.
Con todo, los dos representantes de los jóvenes se han mostrado inquietos y han afirmado que “no sólo nos replanteamos los problemas sino que queremos transformar las palabras en hechos” porque según ellos, “los jóvenes queremos el cambio real del mundo”.
Ante un cambio de modelo, nuevas reglas de juego
Por su parte, el relator del Diálogo Oriente-Occidente, Manuel Montobbio, ha resumido el mundo actual con la metáfora de una larva que se transforma en mariposa. Esta metamorfosis del mundo hacia el que vamos pasa, inevitablemente, por la transformación global, la globalización de la economía, la incorporación de la mujer en el mundo, la incorporación de los jóvenes y la separación entre política y religión. “Es necesario crear un nuevo contrato social para que la larva se convierta en mariposa y pueda volar hacia un futuro esperanzador”, ha afirmado.
Clausura: Construir puentes, destruir muros
Finalmente, la miembro del parlamento de Pakistán, Attiya Inayatullah, ha cerrado la octava edición del Diálogo Oriente-Occidente 2011 remarcando la necesidad de trabajar juntos para crear un nuevo “nosotros”. Inayatullah ha insistido en que “la unión entre países como única forma de solucionar los nuevos problemas que plantea el escenario internacional”. Un escenario que debe ser gobernado sobre todo, por el sentido común y la ética. Según Inayatullah, “sólo se logrará la unión que necesitamos construyendo puentes y derrumbando muros”.