En el primer diálogo se habló sobre las oportunidades que existen para una colaboración entre Beijing y Barcelona en el sector de las TIC en general y de los videojuegos en particular.
Esta colaboración sería de gran interés, debido a que ambas ciudades lideran en sus respectivos países el desarrollo del sector:
Por un lado, Barcelona ostenta la capitalidad mundial de la telefonía móvil, y además organiza anualmente el mayor evento mundial del sector, el 3GSM. Se trata de una excelente ocasión para que emprendendores de ambas ciudades se encuentren y puedan hablar de proyectos de desarrollo conjunto. Por otra parte, Beijing también concentra a las principales empresas del sector de telefonía móvil en China, y por ejemplo, parques tecnológicos como el de Zhongguancun concentran a miles de empresas del sector en uno de los clusters tecnológicos más espectaculares del mundo.
Por otra parte, Barcelona y Beijing también concentran a los principales desarrolladores de juegos de sus países. En Beijing hay más de 30.000 empresas en este sector, con una media de 10 empleados. Sin embargo, hay que tener en cuenta que el ecosistema del mundo de los videojuegos en China y en el resto del mundo es muy diferente. Por poner un ejemplo, en Europa hay dos plataformas para el desarrollo de aplicaciones para videojuegos: Apple y Google. Sin embargo, en China existen más de 100 plataformas y la forma de jugar, la velocidad del juego, la forma de obtener ingresos y otros aspectos difieren mucho. Por tanto, las alianzas para la adaptación de estos juegos puede ser vital para que éstos triunfen en un entorno diferente. Por otra parte, hay oportunidades en la adquisición de compañías de una y otra ciudad porque la forma de crecer en este sector es, en muchos casos, la adquisición de empresas que resulten complementarias a la nuestra.
En el segundo diálogo se habló de las marcas de Barcelona con éxito en China. Uno de los ejemplos más determinantes es el del F.C. Barcelona, que es una marca que reconoce cualquier ciudadano chino. Desde la oficina del Barça en hong Kong se han establecido diferentes alianzas con empresas chinas para introducir sus marcas en china y en resto del mundo a través del fútbol y a través de jugadores como Messi.
Cola Cao fue, por su parte, una de las primeras marcas catalanas en establecerse en China, y ha tenido que adaptar su producto para triunfar en este mercado: el nombre de Cola Cao en chino (Alto, alegre, alto) sugiere que el consumo de leche ayuda al crecimiento en China, ya que se trata de un producto que no estaba tradicionalmente en la dieta del país. También se han adaptado los productos a nivel de sabores, solubilidad con agua, etc para adaptarse a los gustos locales.
Freixenet es también uno de los mejores ejemplos de adaptación del producto al mercado. Además de la exportación de cava se concentra en otros productos como los vinos para hacer frente a la demanda de los consumidores locales, y cada vez más espera hacerlo, además de en las grandes ciudades, en provincias del interior donde el consumo está aumentando de forma exponencial. En definitiva, se trata de tener paciencia y trabajar a largo plazo.
Por último, cabe destacar que las redes sociales e Internet juegan un papel fundamental en el marketing en China a todos los niveles: no estar en las redes y no estar en Internet es sinónimo de fracaso, mucho más en China que en otros mercados.